jueves, febrero 02, 2006

Por una cabeza

Taba re escabio, re quemado, arruinado mal, mal, mal, se me había repodrido la croqueta, loco, antes era un pibe sano, escuchame un poquito, y ahora estaba reloco, guacho borracho y falopero, todo zaparrastroso, cómo pude terminar así?, cómo?, la veeo caaasii coomo un demoonioooo y raasco la alfoombra poor su amooor, aaay, pero qué turra esta minita, aaaahhhh!!!, me enamoró, me engualichó, me engatuzó, y ahora me descartaba sin piedá, no, no, no, así no, no había remedio pa mi mal, pobre pibe, roto el corazón, yiraba mi tristeza por la avenida Olavarría, con la viola colgada y la armónica en el bolsillo, y así de penas crucé la Richieri con la música a otra parte y me metí en la chupadora de enfrente, para qué, frescolari la noche, bajaba la gleba cantando aunque de sueño pueda matarme vas a temblar siempre en mi pecho, y pateaba uno dos uno dos el tufillo de hombre muerto por amor, hasta que, putamadre, sin darme cuenta me mandé cualquiera y me metí en la villalba atrás de los monoblocks de Madero. Cagamos, cobré para todo el viaje.
Al toque me rodearon tres guachos malsanos con los ojos clavados. El más lungo me encara y me dice eehhh, coon tooodo respeetoo, me habilitá dié centavo, yo no te lo veeengo a robaaá, te lo veeengo a peedí, y entonces yo, que estaba boludo por el metejón y tanta droga tanto alcohol, muy pija le sanateo que no me venga a caretear, que si tuviera algo de guita igual no le iba a dar un carajo a un pancho como él, y qué peste tan rara que es el amor, ¿no?, cómo te arruina de verdad para toda la cosecha, y el lungo se quedó un rato pensativo, pero no por mucho tiempo porque después de un rato de querusa me volvió a chamuyar pero esta vez me pidió la viola, ajajá larvón, le dije, antichorro, la viola no me la sacás ni en pedo, y sí, la verdad es que estaba demasiado limado, pero por suerte me rescaté un poquito y agregué: si quieren les puedo tocar algo.
Capaz que les caí simpático, o no me cazaban bien la onda y querían entender, o estaban embolados, vaya uno a saber, la cosa es que los guachines me contestaron bueno, tocate una, así que nos sentamos en un tronco que había por ahí y sin dar muchas vueltas les zapé una de los Redondos, y joya, a los chaboncitos les copaba:
Luuuzbeliito saabe quee suu destiiino es dee sooledad, vé también que los deemaás se dan cuenta de laa risa que le daa, ay!, ay!, ay!, queé risaa le daaa...
Muy flasheados los pibes me pidieron otra, y cómo no, cómo no, y después otra, y otra más, eehh tocate ésta, eehh tocata aquélla, ¿la sabés?, esa no, esa sí, y de esta manera estuvimos toda la noche cantando en el microquiste más mentado(1) de la villa atrás de Madero, en el sudoeste matanzero donde caga la yuta y cagan los hampones más pulentas. Pero yo zafé, porque escuchá, no te ortibés, a la mañana siguiente me desperté, muy solito, apoyado en el tronco, los guachos se habían ido, pero yo descubrí, re contento, que esos pibes tenían códigos, porque al lado mío estaba la viola, en mi bolsillo seguía la armónica, en las patas todavía llevaba puestas las zapatillas negras.
Me puse de pie y volví a Celina, cruzando otra vez la Richieri por Puente 7. A partir de ese día empecé a tener cuidado con las minas, porque yo me engancho muy rápido y termino en cada historia que no sabés, así que juré mil veces no vuelvo a insistir, y bue, y bue!!, posta que no me duró mucho, manú, lo reconozco, porque después de un par de meses me fui con una loca que ni te cuento.




(1)"Mentado". Agradezco a Fabián Casla por permitirme usar esta palabra que nos gusta a los dos. Para escucharla en todo su esplendor, recomiendo el tango "Tres amigos", de Cadícamo: "Tres amigos siempre fuimos en aquella juventud, era el trío más mentado que pudo haber caminado por esa calle del sur..."

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Uau!!!

Unknown dijo...

El metejón es terrible, maestro. Uno hace cada cosa...

Natalia dijo...

Yo te voy a decir una sola cosa, considerando los dibujos de tu blogg: Prometeme que te vas a alejar de las tijeras y de todo elemento cortante, porque queremos seguir leyéndote!

Anónimo dijo...

-ja, muy bueno perdidaliviana.
saludos

-gracias pablo y funes.