jueves, marzo 30, 2006

Rexistencia 26 - Cosas de la calle

Ayer a la salida de la reunión del interpretador me quisieron robar. Ja, justo a mí, que no tengo un peso!

Estaba en una parada sobre Rivadavia esperando el 55, que no venía más. En un momento se me acerca un chabón -tendría 25, 28 años-. Me empezó a pedir plata, hablando afónico, cerrando los ojitos para hacerse el muy drogado, y escarbándose la nariz y sacándose los mocos a modo de escatológica intimidación. Yo le decía que no, que no, que no.

Entonces se me pegó bien al lado y al oído me dijo "y si te digo que soy ladrón y tengo un arma".

Enseguida, casi como un reflejo, lo empujé, para separarlo (por las dudas de que tuviera un cuchillo) y le dije "Mirá vos, te felicito, qué, me vas a robar acá?" y me puse en guardia.

El chabón se quedó calladito y mirándome, ahí a un metro, como que no me cazaba la onda.
Después de un rato me dice: "Todo bien, loco, vos sos un laburante igual que yo", y se fue.

Qué zapato!!

en fin.

El colectivo llegó y por fin pude ir a trabajar. No había nadie, fui al pedo.
Fue la segunda vez en once años que no vendí nada, ni un solo anillo.
Y bue. Un tipo de un bar me dijo que no me caliente, que va a mejorar, que estamos a fin de mes.


Rexistencia 25 --------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

10 comentarios:

Unknown dijo...

La gilada está en todos lados, maestro...¡son como una plaga!

Anónimo dijo...

hay tipos que ni siquiera están preparados para robar. ni siquiera han tenido la educación al respecto. ni siquiera hay educación ladri en este ispa y nosotros andamos reclamando de la otra que enseña a tener una dignidad.

saludos.

Fideos con manteca dijo...

Ese ladrón es gil. No sabe nada.
pero te afanaron alguna vez?
no sentiste que es algo parecido a perder la virginidad? no estoy exagerando...
creo que muchas cosas de mi vida cambiaron cuando me afanaron por primera vez. No sé, un cambio del tipo "antes era un guachito" y "ahora me cuido"
sentís impotencia, ganas de matar a alguien, lástima... es un tema y tanto.
Igual hay varios tipos de choreos.
¿alguna vez afanaste algo?
¿tenés amigos que chorean o chorearon en la calle, de esos que te consiguen cosas?
¿todo un tema no?

principio de incertidumbre dijo...

Yo me quedé pensando que era un escrito (fea palabra) tuyo, pero parece que es verdad. Lo cual me hace pensar que por qué creo que todo es ficción.(?) O, peor, qué importa cuál de las dos sea.


¿Cómo sabés que exageraba con los ojos??? Yo no me hubiera dado cuenta. A mí, específicamente, nunca me robaron, pero si un tipo, tocándase, persiguiéndome de noche, y esas, cosas sí. Así que algo de virginidad rota, como dice fideos, se siente. Y en mi barrio he presenciado varios robos (en el negocio de mi jefe y en casa de un vecino) y ver justo cuando los pibes, rompen los vidrios y gritarles.
Igualmente, mucho más miedo, me da la policía. Y sí, es un tema difícil, porque hay pibes (o gente grande) que no son jodidos. Complicado en un país que segrega tanto.

Anónimo dijo...

yo la otra vez vi detener un robo a fuerza de manzanazos....pero la otra vez que me atacaron x la calle, en un barrio jodido de la chicago argentina,sentí más impotencia aún, al ver q la gente huye y no atina a hacer nada de nada...es más; agradezco que al menos no ayudaron a mi atacante!!a mi me da miedo el miedo q siento últimamente...

Anónimo dijo...

Funes, voyeur, gracias por los comentarios.

Fideos: Sin que me diera cuenta, sobre todo en campamentos, sí, me robaron, pero así de prepo, a mí, por ahora -toco madera- no pudieron, vengo zafando. En la cancha varias veces lo intentaron -una vez me pusieron un cuhillo en la bombonera; otra me rodearon en cancha de velez-, perod e algún modo, siempre con algo de suerte, pude salirme de la situación. La peor fue una vez en villa celina, cerca de la richieri. Me agarré a piñas y me comí un par de manos, pero no me afanaron nada.

Robar yo, pocas veces. Cuando era chico una pelotita de tenis en el club banco hipotecario (ja, tenía unaculpa terrible y me fui a confesar al otro día), y dos espumas en dos corsos diferentes, una en un kiosko, la otra en un puestito. DE grande, de mochilero, robaba mayonesas en los sup. del sur. Y bue, no tenía un peso, andaba a dedo y no comía nada bueno... y con mayonesa podés comer hasta pasto. en fin.

amigos chorros tengo un montón. La mayoría no lo era cuando nos juntábamos de chicos, se hicieron chorros un poco más grandes.
Algunos están presos o tienen causas penales. A uno en particular lo hospedé varias noches en casa, cuando lo perseguían. Otro, que después se hizo cantante famoso de rock, afanaba stereos a los autos (en el
colegio me vendió uno) por dos mangos.
Pero eso era ligth en comparación con otras cosas.

Es cierto, es todo un tema, las conclusiones que uno puede sacar son todas relativas,s e juegan muchos factores.
En el conurbano, ser chorro es mucho más que ser ladrón.
Saludos

Pricipio: Hola. Siempre me gustan tus comentarios.
Y no, no es ficción, va, nunca se sabe, pero creo que no, que realmente me pasó.
LO de los ojitos y toda su exageración no sé por qué lo supe, supongo que
algo de intuición.
A mí también me da miedo la policía, sobre todo la bonaerense.

Rusita: cómo es eso que te atacaron. Contame por mail. ESpero que estés bien.
Nos vemos pronto.

Marto Stef dijo...

A mi me desvirgaron a los 6 años. Entraron a mi casa mientras metiamos el auto en el garage. Yo estaba en la parte de arriba y como mi viejo no subía lo fui a buscar porque estaba la comida. Cuando llegué al garage estaba un tipo con mi viejo.
Recuerdo (o me lo imaginé) que mi viejo le pidió que no tocara el auto porque iba a sonar la alarma e iba a hacer que bajara la gente que estaba en la parte de arriba de la casa.
El tipo lo primero que hizo fue abrir la puerta. Sonó la alarma y mi viejo lo corrio unos metros como para pegarle pero enseguida se debe haber acordado que el tipo tenía un arma porque se frenó de golpe.
Los ladrones eran dos y el otro estaba en el negocio de ropa de mi nona. Me llevaron ahí y parecían ser buena gente porque me dijeron que estaban comprando. Entonces se pusieron a actuar de clientes. Decían: deme todo esto...
Y se cargaban todo lo que había en mi auto. En ningún momento me la creí pero por lo menos lo intentaron. Eran de esos chorros que uno ama, los que tenían codigos.

En realidad, la primera vez, que me robaron no la recuerdo, así que no cuenta. Pero debía tener menos de tres años cuando estaba sentado en la puerta del negocio de ropa de mi mama cuando me sacaron la pulserita de oro. Aunque tal vez la haya perdido.

Vivo en el sur del conurbano. No me hago el pulenta pero los que somos de acá convivimos con el robo de manera bastante natural. Como el sexo anal... despues de la primera vez no se siente tan mal.

Anónimo dijo...

Che, eso de tener amigos que después se hacen chorros es una cagada. se van al carajo cuando se meten con la merca. te digo una cosa: fasitos, quién no se fumó uno? pero la merca es lo peor. creo que si hay una buena razón para dar la vida por algo sería por haberle regentado la cabeza a un narco. Por eso sí hay que salir a las calles y reventar todo.

Anónimo dijo...

Me encantó el principio marxista que esgrimió cuando se complicó lo del afano...

Anónimo dijo...

ja, buena reflexión, bb. sí, parece que es un chorro marxista, con conciencia de clase.
y bue.
saludos