Le pasan todas.
A mí me parece que el de arriba estaba aburrido. De una. Hace poco sobrevolaba los arrabales celinenses y pensó, al ver tanta miseria en las villas cercanas al Mercado Central -que los dejaron en pelotas, que les tiraron el fuerte abajo-, eh guacho un poquito más, qué no, QUÉ NO, se la hacemos de querusa, resucitamos a Job y lo tiramos acá cerca del Riachuelo, que al lado el Jordán es un poroto, y lo probamos otra vez, pero una versión nueva, versión canina, para variar, a ver, dame barro, dame azufre, ¿atigrado te gusta?, dale que sale rebelde, ya está, mamá Boxer, papá Chacal, ¿lo largamos acá?, sí, que esta pampa se zarpa de garrapatas y pulgas, que se le suban!!, a ver si aguanta la Fe!!, quiero ver, gusanos, sarna, parásitos, desnutrición, humillación, vaya, camine.
Y Job, como buen Job, guau!! guau!! con bronca sin comerse ninguna, y nadie lo quiere, pero guau!!, guau!! salen los pobres del desierto y bajo la tierra se retuercen las sombras, las aguas, y vaya, camine, pata va, pata viene, de una reja un super perro le ladra y Job el oxidado se cae, y la vecina de Ugarte se ríe porque es chistoso que un cachorro pise la baldosa floja, eh?, más si es tan gracioso con su andar chaplinesco, aunque le carcoma la sarna y lo perforen los gusanos madrugadores de la muerte, vaya qué buen espectáculo.
Yo lo vi en ese preciso momento, muchos lo saben porque lo leyeron. Había salido para ver al gato blanco amigo de mi papá, muerto en la calle (al final no murió, era otro!).
Un cupido de la compasión nos cagó a flechazos a Nati y a mí y el 27 de noviembre pasado levantamos a Job y lo llevamos a M.A.P.A.
Durante un mes su evolución, que la blogosfera siguió con interés, se llevó a cabo correctamente en la cocina de mi casa, hasta la semana pasada, cuando terminaron los tratamientos intensivos. Hacia el 20 de diciembre, nuestro Job, ya conocido como Totó, se había curado completamente y aumentado 6 kilos (cuando lo encontramos pesaba un kilo y medio, ahora 7 kilos y medio). "Va a ser un perro grande". "Tiene mezcla de boxer". "Es lindísimo".
Pero el de arriba, en plena fiestita de cumpleaños, se acordó y le preguntó a sus amigos: "che, ¿y dónde está Job?"
-En Flores.
-Vamos todos para allá.
ODISEA NAVIDEÑA DE TOTÓ
25 de diciembre de 2005
-22 hs. Totó está jugando alegremente con el héroe griego Ayax el acuático (se hicieron grandes amigos).
-22,15 hs. En el departamento de Caracas se oye un llanto desesperado. Corro al pasillo: Totó se arrastra hacia el living. Llega Nati de la cocina. Ayax se acerca a Totó y empieza a lamerlo. Pero Totó grita como un condenado y sus quejidos son agujas que perforan oídos y paredes.
-22.20 hs. "Es la pata de atrás, la izquierda." "¿Vos viste qué le pasó?" "No, ¿vos?." "Estaba jugando con Ayax." "¿Se le habrá caído encima?" "Estaban cerca de la estufa." "¿Se habrá pegado con la estufa?" Trato de levantar a Totó. Me muerde. Y grita. "Me parece que se quebró la pata." "No te la puedo creer!"
-22. 30 - 23 hs. Llamamos a todas las veterinarias posibles. Casi nadie contesta. Buscamos en internet. Totó, ahora Job, putea y reputea desde el living.
-23.15 hs. Decidimos llevar a Job a una veterinaria las 24 hs. que está en la calle Cuenca, cerca de A. Jonte.
-24 hs. Veterinaria Cuenca y Jonte. Nos atiende una mina. "Hay pobesshito, pobesshito el chiquiiiititoooo", empieza. Mmmm, con Nati nos miramos desconfiados. "Le voy a dar un análgésico, y le voy a dar también un valium." Lo examina, Job la mea de arriba a abajo. "Ay", se queja la mina, "me lo haciste a propósito". Job grita. "Vamos a sacarle unas placas". Pero Job no permite que lo toquen, muerde y rasguña a diestra y siniestra. "Mirá -dice la mina-, para sacarle las placas hay que anestesiarlo completamente". Pregunto cosas y finalmente accedo. "Me da miedo anestesiarlo, así que le voy a dar poco". "Ya está, ahora tenemos que esperar diez minutos". Pasa media hora y Totó sigue recontra despierto. "Me lo hacés a propósito -dice la mina". Yo empezaba a discutir con ella. "Intentemos otra vez". Totó escupe llamas del infierno. "No se puede, qué hacemos?". "Pero vos sos la veterinaria y me preguntás a mí?". "Esteeee". "Cuánto te debo?". "30 pesos la consulta y 15 por las aplicaciones". Volvimos a casa, igual que como nos fuimos. Nati tiene que manejar despacio en los empedrados porque los saltos son intolerables para Job.
26 de diciembre de 2005
2.30 hs. Acomodo el sillón rojo del living y acuesto a Job.
3 - 8 hs. Nati y yo nos levantamos cada veinte, veinticinco minutos, debido a los gritos de Job. Boca arriba y con caricias un poco se calma.
8. 30 - 10 hs. Llamo una y otra vez por teléfono a la veterinaria de la plaza Flores, donde Job es paciente registrado.
10.30 hs. Veterinaria Plaza Flores. El doctor le da un camión de anestesia y Job cae completamente dormido a los diez segundos. "Bueno, ahora llevalo acá a cuatro cuadras, a la veterinaria que está en Nazca y Yerbal, y deciles que le saquen estas placas. Deciles que vas de parte mía".
11.15 hs. Veterinaria Nazca y Yerbal. Una chica nos atiende y nos pregunta "¿por qué está anestesiado este perro?". Le explico todo y me contesta que allí no sacan radiografías hasta las cuatro de la tarde. Puteamos. El doctor de Plaza Flores nos llama por celular. Tiene cola de paja, se da cuenta que se mandó una cagada. Job está flácido, colgando de mis brazos. La gente se detiene a ver el espectáculo de un perrito tan blando.
1130 hs. Volvemos a Plaza Flores. El doctor nos dice que vayamos rápido a la maldita veterinaria de Cuenca (la de la noche), que, aunque son unos ineficientes, le saquen ahora las placas para tener diagnóstico definitivo, que aprovechemos los efectos de la anestesia. "Pero cómo es posible que estemos dando vueltas por toda la ciudad con un perro anestesiado. Por qué se la puso??".
12. 15 hs. Llegamos a Cuenca. Nos atiende una nueva mina, que, como la otra, empieza: "pobeessshitoooo." Con terrible cara de orto, le pedimos que le saque radiografías, "que nadie hace bien su trabajo". La nueva se niega completamente. "No, este perro ya se está despertando". Levanto a Job de la mesa, que retoma sus gritos, y salimos sin saludar.
12.30 hs. Auto de Nati. "Vayamos a la facultad de Veterinaria". No sabemos bien cómo ir. Pero los taxistas nos van indicando el camino.
13. 15 hs. Llegamos a la facultad. "¿Dónde mierda está la entrada?". "Allá". Entramos, nos registramos, lo atienden, contamos la odisea, no lo pueden creer, lo duermen nuevamente y le sacan placas (por fin!!).
1400. Hs. "El perrito tiene fractura de tibia".
15 hs. Job, nuevamente Totó, apenas se mueve por la cocina. Luce una larga pata blanca. Ahora es el capitán Ahab. Llora un poco, pero ya no grita como antes. Su mirada es increíble.
Rexistencia 19 ----------------------------------------------------------------------------
13 comentarios:
che, que se mejore pronto ese perro.
rex con el perro desmayado en brazos es toda una imagen. es casi un dicho: perdido como rex con el perro desmayado.
parafraseando el comienzo de anna karenina podríamos decir que "todas las navidades felices se parecen; las infelices lo son cada una a su manera"
abrazo y cuidado con totó y los petardos de año nuevo
me asombra, tal vez no tanto, que nuestros animales nos necesiten y caigamos a sus pies.
"un perrito tan blando"
se deshace la imagen de ternura!
Rex, se me caen las lágrimas en la oficina!! Pobrecito Totó!
Menos mal que los tiene a uds. que sí tienen corazón, no como los veterinarios que a veces no se puede creer que algunos de ellos se vuelvan tan insensibles (anque pelotudos, también)
Mirá, mil besos a Totó, y creo...pensálo...que te lo tenés que quedar! En serio, el perro se ve que te está predestinado.
Necesita cuidados intensivos, tuvo una niñez de desnutrición y desamparo.
no sé qué es tener un perro.
Rex,
me conmueve que dejes todo en la cancha por un perrito que encontraste en la calle. Ojalá se recupere pronto.
Un abrazo
Maestro, no se si le está predestinado el perro pero si eso le pasa en Navidad, ¿qué le espera en año nuevo? ¡A la espera de ese relato!
Ahora, dígame una cosa... ¿no le parece demasiada mala suerte para el pobre animal? Dicen que después de la tormenta viene la calma: ¿qué será calma para Totó?
...me interesa...
...me interesa...
Me lo re quedaría, pero económicamente se me complica mucho. Veremos. Primero se tiene que curar.
Pobre perrito, todas las que pasó. Suerte para él que lo encontró a usted. Esperemos que pase un fin de año más calmo.
Pobre Totó!! Ojalá se recupere pronto...
Espero que consiga un lugar, porque si lo tiene un tiempito más, por más que no quiera, no lo va a poder dar.
es un perro con suerte, ese Totó...le tenés que agradecer, todo lo que generó su presencia, no?besos
Mirá, si es por eso...hagamos una colecta blogger. Pro-ayuda a Totó
Es que me parece que Totó te te tiene cariño a esta altura. Va a ser duro para él despegarse de vos. Busquemos una manera de ayudarte para que te quedes con él y no se te complique tanto. Pensemos cómo hacer.
Mando un SOS a toda la comunidad blogger que tan sesudamente escribe posts, para que usemos la neurona para encontrar una solución para que Totó se quede con Rex.
He dicho.
la introduccion es èpica, juan*
pero.. creo q para perros, està el campo
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