lunes, febrero 19, 2007

rémora

viejas ideas todavía
cuyas caras juveniles conocieron las horas de mi miedo
acá debajo de las aguas ratifican esqueléticos los gestos
cada bala cada bomba cada muerto

aspecto semejante
entre las bandas se oscurecen los metros de mi década de gloria
tan rápido como se olvidan los sueños a la mañana siguiente
incinerado el ojo por la verosimilitud de las cosas

a cuantos viven
encantados por el espíritu de aventura de mis generaciones
pica este bicho sus intelectos en la boca de la mente
que ya no pudrirá tranquilamente su tiempo

hilos de marioneta
mueven los días y las noches domésticas del pueblo
mientras me capturan en San Cristóbal los soldados
contra la reja de la Iglesia Gótica

viento del este
que baja la niebla empañando el vidrio del Falcon
desaparece de a poco la esquina de Urquiza
un gato se extingue

agujero de agua nacional
que reúne feligreses militantes caídos como ángeles
baña la orilla porteña con las olas de mi aquelarre
las primeras casas se están desmoronando

lentamente
el polvo de los muertos que el aire lleva suspendido
oxida los autos estacionados arriba de la costanera
grabando en las chapas nuestras viejas ortografías

arena movediza
compuesta de cuerpos deshechos recupera kilómetros
es el mar dulce que alfombra en los barrios del norte
una playa de fragmentos cadavéricos

casas blancas teñidas
por el esmalte de los torturados en los edificios navales
una por una caerán envenenadas bajo el alud necrológico
hasta que nada quede en pie en la Avenida del Libertador

5 comentarios:

malena rey dijo...

fuerte juan

Ciclo de Poesía

Bonus Track

Viernes de febrero en el Jardín Botánico

a las 18.00 hs.

VIERNES
23 de Febrero

Leen
Marina Mariasch
Malena Rey

Gabriel Yeannoteguy

Martín Rodríguez

Inés de Mendonça

Ezequiel Zaidenwerg

Dolores Gil

Mariano Blatt



Coordina

Marina Kogan

Anónimo dijo...

Lo que más me gusta de leerte, creo, es la combinación que resulta del cruce entre la militancia cotidiana de una maestra celinense y la habilidad manual del matricero. Serás un hijo sensible del capitalismo, sí, pero ese linaje de tus relatos/objetos maravillosos creó una visión del mundo entre dulce y áspera que yo disfruto mucho.

Anónimo dijo...

Muchas gracias!

Anónimo dijo...

¡vamos todavía, kevin!

LPVD dijo...

qué querés que te diga...