lunes, marzo 07, 2011

el aire levantó una semilla y después
floreció de manera insólita en una plataforma invisible,
arriba tuvo la suerte de estar más cerca del sol
mas no tenía tierra y debió echar raíces en el vacío,
no tenía intenciones,
sólo agua de las tormentas y rayos eléctricos
no la pisaban los hombres ni la meaban los perros
pero los aviones le pasaban encima y
a los pétalos los masticaron motores;
una flor alta, mezclada con los colores del atardecer,
volada del florero improvisado en el campamento;
ahora se marchita el tallo y se dobla, se cae del cielo,
y abajo, nosotros, armamos la vida como podemos,
formamos las caras del cubo trágico, rojo, azul, verde;
uno más uno, dos; dos más dos, cuatro, y así
sucesivamente cambiamos la incoherencia por la lógica.
¿y cuál debe ser la gramática de todo este asunto?
pensar colores, decir números;
pensar números, decir colores.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

me gusta

Pablo Sansone dijo...

La solución cinestésica!
Genial

Pablo Sansone dijo...

Siempre es más efectiva que la sinestésica